A la hora de organizar una boda, son los detalles los que marcan la diferencia. Cuando nos pusimos a preparar la decoración de esta boda en el Convent de Blanes tuvimos claro que teníamos que ser muy detallistas para hacer de este enlace, un evento muy especial.
Para la ceremonia se construyó una decoración trabajando ambientes vegetativos muy orgánicos con hojas de palmeras que combinaban con el mobiliario elegido de alfombras de esparto y sofá de madera, siempre jugando con tonalidades naturales en color madera, melocotón y café con leche. Además de las palmeras, había flores de gramíneas en los mismos tonos.
Para la celebración se continuó trabajando en la misma línea vegetativa que se utilizó en la ceremonia. Así, en el salón instalamos plantas en tonos verdes sobre unas estructuras que formaban unos caminos aéreos sobre las mesas alargadas. Esta sin duda fue la gran atracción del evento. Los caminos aéreos se construyeron con tonos verdes mediterráneo que contenían hojas de palmito dando un aspecto completamente selvático. Además de las plantas de palmeras se instalaron plantas de tilansias que aportaban un toque verde grisáceo muy especial y diferente.
En los centros de las mesas redondas se instalaron unos árboles de encina que daban un carácter aún más natural y vegetativo al espacio.
El sitting plan, construido por la wedding planner Por la boca del fraile también estaba cargado de detalles. Se escribieron los nombres de los invitados repartidos en las mesas en unas vasijas de barro de carácter muy mediterráneo. Junto a esas vasijas instalamos unas estructuras con algunos toques de verde y nuevamente hojas de palmera.
El resultado de todo este trabajo en el Convent de Blanes es una decoración completamente vegetativa que daba un aspecto fresco y natural haciendo del espacio un lugar muy especial y original. Un enlace lleno de detalles que ni los novios ni los invitados podrán olvidar.